Consumid genéricos

Nunca he ocultado mi rechazo a las empresas famacéuticas y el respeto que me causan, si por respeto entendemos miedo. En ciertos ámbitos donde se debate cómo las corporaciones mueven y dirigen el mundo se suele hacer un pequeño inciso para destacar que las farmacéuticas forman parte de estos gigantes. Su poder llega a límites insospechados y nadie debería ignorar por ejemplo que están detrás y son responsables de las epidemias mortales que se suceden en África.
No debemos dar más crédito que el que merece una opinión al vídeo que os adjunto y de hecho mi propósito no es darlo como información veraz pero sí al menos haceros recapacitar. Si queréis verlo completo podéis acudir aquí.

Renacimiento contemporáneo artificialmente dirigido

Durante poco más de 10 siglos de nuestra historia europea, en la Edad Media, existieron dos tipos de personas, los señores feudales (nobles) y los campesinos, ignoremos a la iglesia. Los nobles eran una estirpe, se nacía noble y se era noble por la gracia de Dios, la cuna de nacimiento tejía el futuro que te esperaba y nada podía hacerse para cambiarlo. Demasiados siglos de una oligarquía feudal terminaron por romper este sistema en el siglo 15 con el denominado Renacimiento. Se debió a un grupo de personas asqueados no por no poder tener dinero sino por no formar parte del grupo elitista de los nobles solo por no haber nacido en la familia adecuada por mucho esfuerzo que pusieran en sobre salir de la masa a base de fortunas bien trabajadas. Gracias al dinero que acumulan, este colectivo comenzó a acaparar poder y surgió una nueva clase, los burgueses, en ese momento ya no sólo se nacía noble y rico, uno podía hacerse rico, la diferencia entre ambos: el noble nace y el burgués se hace.
Es curioso como el ser humano puede retorcer la historia y hacerla repetitiva. Hemos asistido desde no hace mucho a una especie de Renacimiento de la belleza artificial. El ser humano ya no nace bello, se hace. Esto no ha fijado el comienzo de una nueva época de oportunidades e igualdades sino más bien el comienzo de la coartación de libertades, un falso avance, un camino hacia el sacrificio por la apariencia como signo del éxito.
Existe y seguirá existiendo una clase feudal de la belleza, personas que nacen con las facciones simétricas y cuerpos de formas armónicas que sin sacrificio alguno mantienen una supremacía externa y pueden fijar otras metas en claves de salubridad o autentico valor como persona. Pero ¿y la clase burguesa? esos a quien alguien vendió una mentira sobre el éxito, quienes admiran a quienes tienen otra clase de éxito porque no han tenido que sacrificar otros ámbitos debido a su noble belleza y que a ojos de los burgueses lo tienen todo. Y como nos han vendido que ahora nadie nace sino que dependemos de nuestro propio esfuerzo, ahí van esos pobres burgueses dirigiendo sacrificios hacia una belleza artificial y divergiendo el esfuerzo de los otros éxitos mortales. De esta forma el burgués acapara un éxito artificial pero merma las posibilidades del éxito inmortal.

Jajajaaaaa

Fascinable

Aviso.
La palabra fascinable no está en el diccionario de la RAE.

Algunas personas tenemos el defecto de poder detectar cuan especiales son algunos seres lindantes y nos acercamos a ellos por admiración. En determinado momento te das cuenta de que estás rodeado de personas tan extraordinarias que puede que en el intento de ser contagiada de algunas de esas cualidades envidiables te quedas de por vida en sus vidas.
También puede que sea una persona fascinable, que no fascinante, que es por el contrario lo que serían quienes deslumbran cegándome. Lo peor de todo es darse cuenta que no llegaras a ser tan elocuente, tan bella, tan buena, tan inteligente, tan noble como esas personas y sigues intentando acercarte a esas cualidades en la medida en la que puedes y cogiendo de un lado y de otro e intentado no perderte en algún punto donde la incesante búsqueda de un imposible cóctel perfecto no llegue a quebrar aquello que sea por lo que tanto ser fascinante revolotea a tu alrededor.

Una maleta sin ruedas

Lo que caracteriza a un turista es la maleta. La maleta con ruedas que carga un turista es síntoma de comodidad y desplazamiento placentero y voluntario.
El ser humano entiende que la integridad es algo propio e individual. Por eso, cuando algo, o alguien, increpa o arremete contra una persona ésta se siente invadida. La invasión metafórica es el sentimiento de pérdida de la integridad como algo individual y propio, es una alienación, una pérdida de la propia identidad.
La persona que ha perdido la identidad no se reconoce y genera la necesidad de reconocimiento en los demás para suplir la carencia de criterio propio. No se puede buscar la aprobación de un criterio inexistente, alienado. Es en este punto y en esta sociedad cuando el cuerpo se convierte en una maleta sin ruedas.

Memories

Quedamos cuando el marciano salía del trabajo y yo me tomaba un respiro del mío. Recuerdo perfectamente que llevaba mi abrigo negro, el mismo que compré cuando iba a COU, lo que significa que tenía exactamente 10 años. Hasta eso mismo resultó ser un ritual inconsciente dentro de todo el ritual francamente consciente. Y nos enfilamos a la búsqueda de una habitación potencia de 2 entre comentarios graciosamente nerviosos sobre la apariencia de las paredes de aquel sitio. Nunca presumí de amistad porque a pesar de haber estado a su lado en momentos difíciles, a pesar de saberme importante, he preferido sentirme prescindible todo este tiempo con el repugnante propósito de ignorar que no estuve a la altura de las circunstancias en los momentos más duros. Como hicieron las personas adultas que desfilaron numerosas veces por los mismos pasillos, debí haber sabido restar importancia a las cosas y haber tenido el valor de pasear mi abrigo por allí más de una vez. Hoy estoy muy lejos y no podré formar parte del ritual colectivo y seguro multitudinario que sin serlo sabemos que es para todos el funeral que no tuviste.

23 Sept 2009