Hasta otra camaradas

No sé cómo empezar ni cómo terminar esta entrada, lo único que sé es que son las 23:59 y que esta es la última que escribo al menos hasta que recupere la ilusión por vivir en este mundo de mierda.
Cuando miro a mi alrededor sólo veo un montón de incomprensión que yo al mismo tiempo no comprendo. A nadie le importa lo que a mi, nadie quiere hablar de ninguno de los temas que a mi me interesan. Puede que esa fuese la razón de ser de este blog pero sólo me causa desilusión ver que a todo el mundo le parece radical y poco importante opinar sobre lo que ocurre.
Si preferir comprar una innecesaria camiseta a Amnistía Internacional que a la tienda de de moda es inútil, si opinar es superfluo puede que me haya equivocado de mundo. Es como si fuese "not of this earth" donde todo el mundo procura su bien particular y ve los telediarios como películas, o sencillamente no los ve.

Mañana por la mañana me levantaré a las 7, me iré a correr, daré una clase inútil a una niña que no quiere aprender y me dedicaré a respirar el resto del día. Durante el día gasto agua, como comida y respiro oxígeno, ocupo un lugar en este mundo y sé que debo dar las gracias por poder hacer esas tres cosas básicas con total normalidad y lujo. La mayor parte de la gente que conozco come su comida sin pensar en la suerte que tiene, respira si recordar que mientras su corazón late el corazón de alguna Persona se para. Me da la impresión de que necesitan que alguien muera de hambre o de una bomba delante de ellos para que sean conscientes. Todos esos muertos sólo quieren una cosa: no ser ignorados, morir como personas ya que no pudieron vivir como tales. Cada vez que cambias el telediario porque te molestan las imágenes, cada comentario de indiferencia es un insulto a la condición humana.
Mañana me levantaré a las 7 para ir a correr, mañana me maldeciré cada vez que coma porque hay gente que no puede hacerlo y muy probablemente me sienta una mierda porque mientras yo esté escuchando las críticas de Leo Bassi en un teatro esas críticas no llegarán más allá de esas paredes. El sentimiento de impotencia que siento es realmente preocupante, me siento profundamente inútil, un ser con una vida sin sentido rodeada de personas que piensan que soy tonta, no tengo rumbo, no tengo uns misión en la vida, mi vida no sirve para nada.
No puedo evitar odiaros, aunque os quiero, pero no puedo evitar pensar que ocupo un lugar que no me pertenece, un sitio equivocado en una sociedad que no entiende mis protestas.
Este blog es una mierda, puede que adelante más haciéndome voluntaria de Amnistía. Al mismo tiempo haré lo que todos vosotros, ir a votar pensando que así ya lo he hecho todo, o no ir a votar porque no soy conciente de la suerte que tengo de poder elegir el rumbo de mi país. Hace poco se legalizaron los matrimonios homosexuales, hace poco se retiraron las tropas de Irak y se hizo porque en la sociedad había un rumor constante que lo pedía ¿no os daís cuenta que de eso se trata la democracia?
Son las 0:33 y no ha cambiado nada.